Gemma Pascual
// Fotografía
LAS AGUEDAS
Zamarramala es una pequeña localidad de la provincia de Segovia, en la comunidad autónoma de Castilla y León, que se ha hecho famosa en toda España por su fiesta de las Águedas. Esta festividad se celebra desde que las mujeres del pueblo ayudaron a reconquistar el Alcázar de Segovia, que había sido tomado por los Sarracenos en la Edad Media.
Desde entonces, se les concedió a las mujeres el privilegio de mandar una vez al año, en una de las fiestas más antiguas de España que se remonta a 1227. El día de la fiesta, el cura recoge a dos Alcaldesas por el pueblo, quienes presiden los actos festivos.
La celebración comienza con un pregón, en el que se anuncia el comienzo de las festividades. A continuación, se realizan bailes tradicionales de la región, que son acompañados por la música de la dulzaina y el tamboril.
La fiesta culmina con la quema del Pelele, un muñeco de paja que representa a un hombre malvado y que es rechazado por las mujeres del pueblo. La quema del Pelele es un momento muy esperado por los habitantes de Zamarramala y supone el fin de las festividades.
La fiesta de las Águedas es una celebración única que destaca por su carácter tradicional y su importancia para la cultura y la historia del pueblo. Además, es una muestra de la importancia que las mujeres han tenido en la lucha por la libertad y la igualdad a lo largo de la historia, y cómo su papel ha sido reconocido y valorado en la cultura popular.